PUENTE MILVIO, ADIOS A LOS DIOSES.

"Enya - We are free now"

De los tantos puentes que en la actualidad cruzan el río Tíber en Roma, el puente Milvio es el mas viejo, fue construido en piedra en el año 1425, el anterior había sido erigido por el emperador Nerón.

Este puente -a raíz de una novela reciente- se ha hecho famoso por la nueva costumbre de los enamorados de llevar un candado con su nombre y dejarlo enganchado en una farola del puente y arrojar la llave al río.

Los candados significan el amor eterno, pero si hacemos cuentas la gran mayoría de nosotros tenemos una buena cantidad de candados en nuestro haber, pero bueno como todo es cuestión de fe.



Pero este puente tiene otro significado, recuerda a una batalla que fue un punto de inflexión para todo occidente.

En el año 312 de nuestra era, mas precisamente el 28 de octubre, allí cerca se libró una batalla que decidió el final del culto de los antiguos dioses y el triunfo del cristianismo.

Allí se enfrentaron Constantino que era cristiano con Majencio el emperador que seguía el culto de los antiguos dioses, aquellos que habían acompañado a la historia de Roma durante mas de mil años, durante siglos Roma adoptó a los dioses que iba conociendo a medida que el imperio se expandía, nunca se prohibió al vencido el culto a sus dioses, Roma siempre fue tolerante e inclusive llevaba los dioses al Panteón de la Urbe donde era venerado por quien quisiera.

La batalla del puente Milvium ha pasado a la historia como un hito decisivo que marca el declive del culto antiguo y el auge del cristianismo como religión oficial a partir del Edicto de Milán del 313, todo gracias a la conocida narración del Obispo Eusebio sobre el "Sueño de Constantino" donde este vio en el cielo una inscripción que decía “In hoc signo vinces”(con este signo vencerás) turbadoramente igual a lo que dice la marquilla de los Pall Mall.

A partir de ahí los seguidores de los antiguos dioses comenzaron a ser perseguidos, sus templos cerrados, destruidos o convertidos en templos cristianos, a ellos se los comenzó a llamar “paganos” es decir campesinos, por cuanto los últimos en mantener aquel culto fueron los habitantes del campo, quizás porque estaban mas unidos con la naturaleza que los rodeaba.

La derrota de Majencio significó el fin de los dioses antiguos, pero yo me resisto a pensar que dioses tan poderosos que gravitaron sobre todos nosotros se esfumaran, o peor aún, se fueran yendo de a poco a medida que los ciudadanos dejaron de invocarlos.

A donde fueron? Donde está Zeus?

Démeter ya no habita alternadamente cada seis meses el Olimpo y el Inframundo cambiando así las estaciones en la Tierra?




Perséfone sigue habitando el Hades por haber comido de aquella granada del Tártaro?



Poseidón no es mas el causante de los terremotos y las tormentas en el mar?



La diosa Fortuna ha dejado de influir sobre nosotros?

Némesis no sigue equilibrando nuestros destinos?



Cupido ha dejado de arrojar sus flechas sobre los enamorados, y si es así, como nos enamoramos entonces?



Aracné seguirá tejiendo cumpliendo el castigo impuesto por Afrodita?



Donde ha ido a parar Afrodita y toda su belleza?



Hades ha dejado de gobernar sobre el Inframundo? Y Caronte abandonado su barca con la cual hacernos cruzar el Estigia?



Cerbero ya no cuida las puertas del Inframundo?



Donde están ahora, que fue de ellos?

El mundo no ha cambiado mucho, hemos padecido el horror, la violencia y la guerra así como los desastres naturales en forma similar a cuando aquellos dioses nos regían, es decir el cambio no se ha notado, la justicia no nos gobierna, no somos mejores que nuestros antepasados, quizás si mas soberbios y mas hipócritas.

Los pontífices, los augures y auruspices, no violaban no tenían una doble moral como los sacerdotes actuales.



Aquellos dioses eran mas creíbles, no nos obligaban a actitudes contrarias a nuestra naturaleza e instintos, donde la homosexualidad, la bisexualidad no debía ocultarse.



El sexo se disfrutaba si culpa, sin ese velo de lo prohibido, ni el puto pecado, cojer era visto como lo que es, una de las cosas mas importantes y por las que vale la pena vivir en este mundo.



El celibato, la virginidad, la castidad, y la fidelidad, eran conceptos distintos a los de ahora, hoy en día si un creyente se divorcia no puede comulgar mas es decir se pierde y condena su alma, salvo que tenga el dinero suficiente para la dispensa otorgada por el Vaticano de la Sacra Rota.

Como se permitían todas las religiones que fueran tolerantes, no existían los herejes y por lo tanto no eran quemados en hogueras.



Los pecados que hoy se confiesan antes eran nada, solo hechos cotidianos que como uno sabia que iba a seguir haciéndolo no caía en la hipocresía de confesarlos para después seguir practicándolos pero eso si con culpa.



No existia como hoy en dia la ablación de los genitales femeninos, donde es práctica habitual en 28 naciones del Islam, y a modo de ejemplo el 97 % de la mujeres de Mali les han cortado sus labios vaginales y clítoris con excusas culturales, machistas, egoístas, retrógradas e hijas de puta, justamente mutilando una de las cosas mas hermosas que existen en este mundo.



Tampoco se circuncidaban los hombres como actualmente lo hacen algunas religiones, con excusas como razones de higiene, pero convengamos que solo recién después de no lavarnos la verga durante muchos años ahí podríamos llegar a sufrir alguna infección.



Antes el dios Príapo era el dios del miembro viril, hasta teníamos un dios dedicado a nuestro querido y sufrido "amiguito", hoy no hay santo patrono que lo proteja.

Hagamos memoria pero en la antigüedad no hubo guerras a causa de la religión, ellos eran mas directos, el tema era el poder, los intereses económicos, pero los sacerdotes no gravitaban como para causar una guerra, en cambio en la actualidad, con el viejo verso de la "tierra prometida" los sionistas hijos de mil putas siguen masacrando al pueblo palestino.

Las guerras siguen, y en todos los bandos siempre hay algún pelotudo que invoca el viejo axioma de “Dios está con nosotros”, lo cual quiere decir que por lo tanto no está con “los otros” hecho que también sostienen los enemigos de en frente.

Yo estoy seguro que todavía existen los dioses, y que por lo tanto esperan algún reconocimiento nuestro, quizás si los invocamos, tanto por agradecimiento como por lo poco que trabajan nos escuchen.

Y cuando me llegue la muerte no quiero el cielo de los cristianos, espero que las Valkirias me vengan a buscar a caballo, yo quiero el Walhalla de los germanos para empedarme* con cerveza, comer cerdo y jabali a mas no poder, cagarme a golpes con mis compañeros, andar a caballo y que la lluvia me pegue en el rostro, reirme y cojer todo lo que pueda.



Con probar no perdemos nada, yo empecé con Pingocho.

*empedarme: beber en demasía, embriagarse.

(NdR. Según en contador de IP que tengo instalado, el día 5/2/10 durante una hora me estuvieron leyendo desde el Vaticano, yo quiero pensar que fue el Santo Padre, inclusive me levantaron una foto, de ser asi le ruego a su Santidad que ore por el alma que perdí y que no se toque de ser posible, o en todo caso que lo haga a cambio de no "comerse" ningún monagillo. Muchas Gracias.)